cerrado

¿acaso no te amedrenta
lo que chillarán las palabras
si nuestra correspondencia
las pone a hablar fantasmas?

mas ya mejor me despido;
no vayan a maliciar que los dos
no somos sino: tú el olvido,
yo apenas tu sombra y tu voz.

pero antes, un fiel consejo,
...trata de no regresar.
todo aquí se ha vuelto espejo
y no hay hacia donde mirar.

(eduardo mitre - carta a la inolvidable)